Como la palabra lo dice, los textos descriptivos son aquellos que están basados principalmente en relatar cómo es algo tanto en su forma interna como externa sin importar que se trate de un objeto, de un paisaje, de una persona o un animal.
La principal característica de dichos escritos, además de aclararle muchas dudas al lector, es que ponen especial énfasis en los detalles de las descripciones para que el lector tenga una idea mucho más acertada de lo que protagoniza dicho escrito.
El texto descriptivo forma parte de casi todas las obras literarias.
Textos descriptivos sentimentales
Son aquellos tipos de textos descriptivos que le cuentan al lector cómo son los sentimientos de él o los protagonistas de la historia. Por ejemplo “el miedo lo paralizó y le impidió moverse”.
Los textos descriptivos no solo describen cosas que se pueden ver y tocar sino que también hacen lo mismo tanto con los sentimientos, como las situaciones y también las acciones.
Objetivos
Son aquellos textos descriptivos que brindan la información mucho más precisa y exacta del objeto, persona o animal del que se trata el escrito. Se destacan por tener una mejor aproximación a lo que se quiere describir y no cuentan con dobles sentidos que pueden prestar a confusión por parte del lector. Se caracterizan, principalmente por contar cómo es el aspecto físico del objeto. Esto, como consecuencia vuelve más veraz al texto en cuestión. Un ejemplo podría ser “era un joven alto, de ojos marrones y cabellos negros” si el objetivo principal es el de describir una persona.
Subjetivos
Al contrario del anterior, en este caso los textos descriptivos llamados subjetivos tienen mucho que ver con lo que el autor piensa o siente. Es decir que nos da a entender cuál es su punto de vista. El escritor también es capaz de transmitir su estado de ánimo, al igual que sucede con los textos descriptivos sentimentales.
Por lo general emplean metáforas tales como “su cabello rubio me recordó un campo de trigo recién sembrado” y el lenguaje que se utiliza es mucho más connotativo. Este tipo de descripción hace que el texto se transforme en algo mucho más interesante para el lector de lo que en realidad es ya que apela a su imaginación. Por lo general se realizan diferentes tipos de descripciones subjetivas de acuerdo a los sentidos.
Esto sucede en el caso de, por ejemplo, las sensaciones visuales en las que se describe algo por su color (un vestido azul), auditivos los cuales describen a las cosas por el sonido que emiten (por ejemplo, sonido ensordecedor). También se conocen textos descriptivos subjetivos que hacen hincapié en el sentido del gusto (pastel dulce, carne salada) y al olfato (olor a pan recién horneado). Por último, podemos mencionar también la sensación táctil en la que el escritor describe lo que se siente al rozar un objeto en particular (piel rugosa, suelo húmedo).
